1.-
LA
ILÍADA Y LA GUERRA DE TROYA. 
La
Ilíada no narra la
guerra de
Troya, se concentra en nueve días. Lo narrado se refiere al
noveno y último año
de la guerra. Al autor le interesa la cólera de Aquiles: sus
causas, sus
consecuencias y el desenlace que de ella se deriva.
La
grandeza de Homero reside en que es capaz de hacernos ver
cómo un episodio en
apariencia menor -la cólera de Aquiles- puede incidir sobre
el desenlace de una
gesta de mucha mayor envergadura -el enfrentamiento de griegos y
troyanos y la
posterior caída y destrucción de Troya-.
Los
acontecimientos que preceden al tema de la Ilíada estaban
narrados en los Cypria
(cantos chipriotas). Se trataba de once libros en los que se narran los
orígenes de la guerra de Troya.
Los
acontecimientos que continúan al relato donde lo deja Homero
estaban narrados
en cinco libros de la llamada Etiopida. Las Posthomérica, de
Quinto
de Esmirna, narran en 14 libros, de forma sistemática,
aunque en época ya muy
tardía, esos mismos sucesos, acaecidos entre el final de la
Ilíada y el
comienzo de la Odisea.
A.-
CONTENIDO
La
Ilíada consta de 24 rapsodias o libros. Curiosamente, la
división en esos 24
grandes capítulos no fue obra de Homero, sino de los
filólogos alejandrinos del
siglo III a.C.
El
canto I comienza con el enfrentamiento entre Agamenón y
Aquiles a causa de la
hermosa cautiva troyana Briseida. Agamenón se la arrebata a
Aquiles y este,
furioso, decide no combatir. A partir de aquí (II-IX), se
suceden diversas
alternativas; se presentan en acción a diferentes caudillos
griegos: Menelao,
Diomedes, Áyax. Se presenta también al troyano
Héctor.
El
canto XI muestra el nerviosismo que cunde en el bando griego ante el
avance de
los troyanos. El anciano Néstor ruega a Patroclo que
persuada a Aquiles para
volver a la lucha. Vano intento. Los cantos XII al XVI marcan el avance
sostenido de los troyanos. Patroclo pide a Aquiles que le preste su
armadura
para salir con ella al campo de batalla y atemorizar a los troyanos. A
regañadientes, Aquiles accede. Patroclo se enfrenta a
Héctor y muere.
A partir
de aquí (XVII-XXIV),
asistimos a la transformación de Aquiles en un torrente
desbordado, cargado de
ira, deseoso de venganza, que no descansará hasta dar muerte
a Héctor. Ello
sucede en el combate decisivo librado en el inolvidable canto XXII. Los
funerales en honor a Patroclo y el encuentro entre Aquiles y
Príamo, padre de
Héctor, que acude a la tienda de quien ha matado a su hijo
para recoger su
cadáver, ponen punto y final al poema.
B.-
ESTRUCTURA
No
se trata de estampas sueltas e inconexas. Evidentemente, la
cólera de Aquiles
tiene una causa y unas consecuencias que llevan a la muerte de
Héctor. Las
acciones se van encadenando perfectamente en una relación
lógica hasta llegar
al final. Preparación o anticipación y
retardación son palabras clave para
explicar la unidad de la obra. Pero, en general, es toda la trama la
que va
dándose sentido a sí misma hasta alcanzar el
clímax, con la muerte de Héctor.
La estructura de la Ilíada, por más que parezcan
enturbiarla digresiones y
añadidos, es de tipo claramente arquitectónico.
C.-
PERSONAJES
La
galería de personajes que ofrece la Ilíada es
inacabable, por lo que haremos un
estudio selectivo de los más llamativos o importantes. Estos
no son personajes
de la guerra de Troya, sino personajes de la vida humana; por ello han
resistido el paso del tiempo.
Los
griegos.
- AQUILES.
Protagonista absoluto del poema,
tiene de todo menos equilibrio. Todas sus acciones son extremas, sin
embargo,
razona con coherencia.
- AGAMENÓN.
Exponente máximo de la frustración.
Tiene todo el poder de Micenas (rey de reyes).
- ÁYAX.
Razona menos que Agamenón, porque
es el exponente de la fuerza bruta.
- DIOMEDES.
No tiene la fuerza de Áyax, aunque
muestra destreza en la lucha.
- MENELAO.
Es recordado como el responsable
último del rapto de su esposa, la bella Helena. Su
contribución al avance de
los griegos es muy escasa.
- ODISEO.
Astuto, con muchas ideas y destreza
con su lanza. Es el caudillo capaz de argumentar y reflexionar primero
y pasar
a la acción después.
- NÉSTOR.
Es el reflejo de la sensatez, fruto
de la experiencia que dan los años. Homero lo ha
traído sabiamente al campo de
batalla para decirnos que en la guerra no bastan solo los famosos
generales y
los bravos soldados; la voz de la experiencia debe dejarse
oír en el fragor de
la lucha.
- PATROCLO.
Personaje de una ternura
excepcional. En él personifica Homero los valores del
cariño, de la bondad y de
la amistad.
Los
troyanos.
- HÉCTOR.
Reúne en su persona todas las
características de los caudillos griegos.
- ENEAS.
Al lado de Héctor es un personaje
secundario. Ni puede cargarse nada negativo en su haber ni sus gestas
pasan de
notables.
- PARIS.
Es el segundón, el hermano cobarde,
el que no da la cara, el que hiere con flechas..., que, sin embargo, en
la saga
acertará con su flecha en el talón de Aquiles.
- PRÍAMO.
Padre de Héctor. Antes, durante y,
especialmente, después de la muerte de Héctor, al
encontrase frente a frente
con Aquiles, Príamo da un ejemplo de sensatez y de humanidad
- HÉCUBA.
Madre de Héctor. Compone el cuadro
familiar y aporta dramatismo a la muerte de Héctor.
- ANDRÓMACA.
Completa la idea de que las
mujeres, que no acuden al campo de batalla sufren en sus carnes el
dolor de la
guerra. Esposa de Héctor y madre del pequeño
Astianacte.
Personajes
divinos.
Casi
todo el panteón olímpico participa activamente en
el conflicto. Poseidón y
Apolo a favor de los troyanos; también Afrodita. Por su
parte, Hera y Atenea
protegen con firmeza a los griegos. Todo el desarrollo de los
acontecimientos
cuenta con la aprobación de Zeus. Las reacciones de los
dioses son totalmente
humanas; en ello radica su grandeza.
Sin
embargo, el protagonismo en la Ilíada lo tiene la Moira, esa
especie de fuerza
divinizada que está incluso por encima de los dioses; esa
especie de “parte” de
destino asignada a cada uno y a la que es imposible sustraerse.
D.-
SIGNIFICADO
A
partir de un enfrentamiento armado, la guerra de Troya, Homero ha
pintado en la
Ilíada la gran escuela de la vida: dioses, padres, hijos,
jóvenes, viejos,
mujeres; la violencia, la venganza, la muerte, el dolor, la amistad,
los
resentimientos, la discordia, la concordia, el éxito, el
fracaso...; la vida,
en una palabra.
En
la Ilíada se responde a muchas preguntas. Siempre con la
misma respuesta.
Cambian las generaciones, progresa la técnica, y, sin
embargo, el alma humana,
la vida humana permanecen.
2.-
LA
ODISEA 
La
Odisea es un libro relacionado con la guerra de Troya. Fascina por su
ritmo
trepidante y por su acción dinámica. En la Odisea
nadie ni nada se detiene. Y
toda ella está vertebrada en torno al personaje que le da
título: Odiseo. Él es
el protagonista total y absoluto del poema.
A.-
CONTENIDO 
La
Odisea narra las aventuras de Odiseo en su viaje de regreso desde Troya
a
Ítaca, así como las peripecias que acontecen en
la isla desde su llegada hasta
el encuentro con su esposa, Penélope.
El
poema comienza con una reunión de los dioses en el Olimpo;
Odiseo se encuentra
en compañía de la ninfa Calipso, que lo retiene a
la fuerza desde hace tiempo.
Deciden, pues, intervenir para que el héroe pueda proseguir
su camino. En Ítaca
cunde la impaciencia entre los pretendientes de Penélope y
la desesperanza
entre las personas que aún confían en el regreso
de Odiseo. Telémaco, el hijo
de Odiseo, se hará a la mar en busca del padre. Odiseo,
mientras, sufre una
terrible tempestad tras abandonar la gruta de la ninfa Calipso.
Naufraga,
pierde su embarcación y logra sobrevivir agarrado a una
roca. Un golpe de mar
lo arroja al litoral de Esqueria. Allí es recojido por la
princesa Nausícaa. En
presencia de los reyes Alcínoo y Arete, Odiseo escucha al
aedo Demódoco cantar
el episodio del caballo de Troya. Los cantos IX al XII recogen toda esa
seria
de peripecias: el enfrentamiento con los cicones, el país de
los lotófagos y el
violento suceso del Cíclope. Explica a
continuación cómo llegaron él y sus
compañeros
a la isla de Eolo y cómo hicieron estos un uso equivocado
del odre de los
vientos. Llegan al palacio de la hechicera Circe, que los
transformará en
cerdos a todos excepto al héroe. Logran recobrar su forma y
escapar para ir a
dar al país de los violentos lestrigones. Después
Odiseo se adentra en el mundo
subterráneo de los muertos. Más adelante Odiseo
sortea los escollos de Escila y
Caribdis, hace oídos sordos al canto de las sirenas, logra
abstenerse de comer
carne de las vacas sagradas de Helios y llega a la isla de Ogigia,
donde la
retiene la bella ninfa Calipso.
A
la mañana siguiente, Odiseo zarpa rumbo a Ítaca.
Desde aquí hasta el final,
Odiseo disfrazado, se irá dando a conocer a
Telémaco y Eumeo, siendo a su vez
reconocido por Euriclea, la sirvienta más anciana de
palacio. Urdirá con
Telémaco un plan para aniquilar a los pretendientes. Tras el
banquete tiene
lugar la prueba de fuego para conseguir la mano de Penélope:
tensar el arco de
Odiseo y disparar con él una flecha que debe pasar por el
ojo del mango de doce
hachas puestas en fila. Solo Odiseo lo consigue. Por fin Odiseo y
Penélope se
dan a conocer. El entierro de los pretendientes y la visita de Odiseo a
su
anciano padre, Laertes, cierran el libro.
B.-
ESTRUCTURA 
Compuesta
por 24 cantos, bajo los que se esconden un innegable orden
interno:
- Cantos
I al IV: preparación y desarrollo del viaje de
Telémaco.
- Cantos
V al VIII: aventuras de Odiseo contadas en tercera persona.
- Cantos
IX al XII: aventuras de Odiseo narradas en primera persona
por
él en el país de los feacios.
- Cantos
XIII al XVI: peripecias de Odiseo en Ítaca
disfrazado de
mendigo, en compañía del porquerizo Eumeo.
- Cantos
XVII al XX: episodios de Odiseo en Ítaca,
infiltrado ya
entre los pretendientes de Penélope.
- Cantos
XX al XXIV: matanza de los pretendientes y consecuencias
derivadas de
ella.
Son
seis
unidades de cuatro cantos.
Bajo esta estructura, aún descubriremos las tres sagas que,
convenientemente
ensambladas entre sí, sin duda por un poeta genial, muy
probablemente Homero, están
en la base de todo el poema.
El
protagonista aquí es el hijo. Esta
fase es un añadido posterior: No hay peripecias y los
lugares geográficos son
reales.
Es el
núcleo básico del poema. Es la
saga más antigua. La geografía habla de seres y
paisajes fantasiosos y
exóticos, que se alternan con descripciones ajustadas al
mundo micénico.
- La
venganza y la matanza de los pretendientes:
El folclore
popular conocía historias
semejantes, en las que un héroe ausente tras una serie de
pruebas se da a
conocer y resuelve una situación problemática de
forma favorable a sus
intereses. Aquí el autor ha sabido ensamblar perfectamente
el tema con el de
las aventuras de Odiseo.
Así,
mientras que la Ilíada muestra
una estructura arquitectónica, la Odisea responde
más bien a una estructura
sinfónica, aunque con matices; puede intercambiarse el orden
de los episodios
dentro de cada saga, pero no el orden general del poema; el hijo debe
buscar al
padre antes de que este aparezca.
C.-
PERSONAJES
La
Odisea no presenta una gama tan variada de personajes como la
Ilíada, pero
ofrece campo abundante y propicio para un análisis del que
se extraen curiosas
conclusiones.
Odiseo
Único,
genial, arrebatador, irrepetible. Lleno de energía, de
imaginación, de ingenio,
de habilidad. A veces sin escrúpulos, a veces cruel, a veces
tierno. Exigente
con sus compañeros. En movimiento, siempre activo, siempre
dinámico. Él dirige
su propia nave, marca su rumbo y decide a dónde quiere ir.
No es un vagabundo.
Siempre sabe que su meta es Ítaca. Odiseo parece ser el
único que lo tiene
claro. No así sus compañeros, que se acomodan en
la primera isla que atracan.
La capacidad para la acción oscurece su lado sensible y
sentimental.
He
ahí la segunda gran característica de Odiseo: su
capacidad para resistir, para
soportar adversidades, dolores físicos y dolores morales.
Dinamismo,
imaginación, energía, resistencia y tenacidad.
Personajes
de Ítaca
- PENÉLOPE:
paradigma de la esposa fiel y abnegada. Tiene tenacidad, resistencia,
ingenio e
imaginación para engañar y burlar a los
pretendientes. Está activa. La sostiene
la esperanza. Saca fuerzas de flaqueza y resiste. Cuando tiene a Odiseo
frente
a frente, lo ignora; en la distancia, en cambio, se identifica
totalmente con
él.
- TELÉMACO;
joven impulsivo y cariñoso que capta la situación
del padre y la asume como
propia, y presta una colaboración y una ayuda excepcionales.
Está siempre en
movimiento. Padre, madre e hijo, cada uno en su área de
movimiento y de influencia,
están en acción.
Otros
personajes del entorno de palacio
- LOS
SIRVIENTES: escindidos en dos bandos: los que mantienen la
fidelidad a
su señor
y los que se han pasado descaradamente al bando de los pretendientes.
Eumeo,
Filetio y Euriclea son un canto al valor de la esperanza, la fidelidad
y la
lealtad. Por contraste, el cabrero Melantio y al menos doce de las
cincuenta
esclavas de palacio han abandonado a Penélope, y
están más pendientes de
tontear con los pretendientes que de cumplir con sus obligaciones.
- LOS
PRETENDIENTES: Son individuos que no tienen valores, y que
quieren
enriquecerse
enseguida sin trabajar.
Personajes
alejados de Ítaca
a)
Personajes femeninos
- CALIPSO:
da rienda suelta a la pasión física que siente
por Odiseo. Él consiente al
principio, pero con el tiempo la situación se vuelve absurda.
- CIRCE:
convierte a los hombres en cerdos; es la mujer que engaña a
los hombres. En el
caso de Odiseo, lo intenta pero no lo consigue.
- NAUSÍCAA:
es encantadora, pero infantil. Por un instante, Odiseo parece sentir
una cierta
atracción por ella. Pero Nausícaa tiene su boda
ya apalabrada y Odiseo está ya
cerca de Ítaca.
Las
tres mujeres se oponen a Penélope, que es, al fin y al cabo,
el punto de
referencia de Odiseo.
Todos
los demás personajes son fundamentalmente
alegóricos.
b)
Alegorías de la violencia.
- CÍCLOPE:
representa el monstruo la fuerza bruta, la violencia desmedida a la que
no se
debe replicar con las armas. Odiseo representa la inteligencia, el
sentido
común.
- LOS
CICONES: son un pueble violento, que replican a una
incursión para hacer
provisiones y poder avanzar. Conseguido el objetivo, debe marchar. Los
compañeros no lo entienden y por su tardanza son atacados
por los Cicones.
- LOS
LESTRIGONES: personajes gigantescos de cuerpo pero no de
mente,
violentos y
agresivos. Arrojan grandes peñascos sobre las naves de
Odiseo y son muy
numerosos. Por ello, ese grupo debe evitarse.
c)
Alegorías de la
seducción
Cuatro
tentaciones acechan a los navegantes: el hambre, el cansancio, la
desesperanza
y la lentitud.
- EL
PAÍS DE LOS LOTÓFAGOS y LAS VACAS DE HELIOS:
pueden saciar el hambre de los
viajeros, pero a costa de cobrarles un precio muy elevado. El dulzor
del loto
atonta, sacia el cuerpo y obnubila la mente; el que come de ese fruto
quiere
quedarse en esa isla para siempre, se olvida de volver a su punto de
destino.
Las vacas del Sol son sagradas; dicho de otro modo, son alimento
prohibido.
- EL
ODRE DE EOLO: bien utilizado, es positivo; aviva la marcha
de la
navegación;
mal utilizado, da al trate con ella.
d)
Alegorías de los seres fantásticos e
invisibles
- EL
CANTO DE LAS SIRENAS: la seducción que viene de
melodías fabulosas, que alagan
los oídos y, al igual que el dulzor del loto, obnubilan la
mente. La forma de
combatirlo es taparse los oídos y amarrarse al
mástil.
- LAS
SIMPLÉGADES, ESCILA y CARIBDIS: exigen mucha
habilidad:
Escila es un monstruo
que se ve; Caribdis, un remolino que engulle y que no se ve. En la
duda, el
consejo de Odiseo es evitar a la que no se ve y acercarse
más a la que es más
visible.
Así,
la violencia, la seducción de los sentidos y los peligros
reales u ocultos son
los escollos que pueden dar al traste con la ilusión del
navegante. Los
compañeros de Odiseo representan al hombre débil
que va cayendo. Odiseo es el
héroe popular que, sin perder un ápice de su
humanidad, va resistiendo y
superando las dificultades.
Personajes
divinos
La
Odisea cuenta con la presencia de dos importantísimas
divinidades enfrentadas
desde siempre: Poseidón y Atenea.
- POSEIDÓN:
es hostil a Odiseo. Desata tempestades, impulsa vientos. La violencia
del mar
es real; el mar existe en la realidad, no en la imaginación
de los navegantes.
Poseidón se encarga de recordarlo a cada instante. No han
superado los
marineros una adversidad cuando ya se prepara la siguiente tempestad.
En ese
sentido, Poseidón resulta implacable.
- ATENEA:
no deja a Odiseo ni un momento. Es, antes que nada, la fuerza de la
mente,
capaz de dominar la lanza. Odiseo representa el ingenio, la listeza, la
astucia, el sentido común; Atenea completa todo eso con unas
dosis de
inteligencia. Con Atenea, Odiseo es invencible, sale siempre airoso,
siempre
triunfa.
D.- LENGUA
Y ESTILO
La
Odisea está escrita en hexámetros, como la
Ilíada. Su lenguaje es formular,
artificial, mezcla de varios dialectos, si bien en la Odisea aparecen
más
rasgos del jonio que en la Ilíada.
Aunque
en el fondo el relato es totalmente distinto, el realismo sigue
marcando
también este poema. Las descripciones de los palacios son
detallistas. La
narración, ágil, viva, llena de matices
coloristas. Hay empleo del estilo
directo, la narración en primera persona. Pero, a diferencia
de la monotonía en
la Ilíada, aquí la variedad es una constante. Nos
habla más de lo cotidiano, lo
rutinario en apariencia. La Odisea es un buen documento para conocer
los
interiores de la civilización micénica. Se
complace en mostrarnos la intimidad
de los personajes que habitan en un palacio micénico.
E.-
SIGNIFICADO
¿Por
qué, junto con la Ilíada, la Odisea es el
clásico por antonomasia, tema de
estudio para la adolescencia europea durante muchos años? La
respuesta parece
obvia: la Odisea, al igual que la Ilíada, no es otra cosa
que la gran escuela
de la vida. Aquí la vida se concibe como una
navegación. El mundo parece ser el
mar, pero no solo sus aguas; también sus islas. Y los
peligros vienen de las
aguas y de tierra firme. Nadie más que uno mismo puede
pilotar su propia barca.
Los compañeros y los amigos acompañan, pero
Odiseo llega solo a Ítaca; frente a
Penélope, Odiseo está solo. Es uno mismo quien
tiene que tomar las decisiones
importantes.
Odiseo
sale de Ítaca, llega a Troya y vuelve a Ítaca.
Odiseo no es un aventurero, es
un luchador.
Y
la vida sentida como un cúmulo de experiencias de las que
siempre se extraen
conclusiones. El Odiseo que regresa es mucho más sabio que
el que parte, ha
vivido mucho más, tiene mucha más experiencia, ha
conocido gentes, países.
Odiseo ha superado una serie de dificultades.
¿Por
qué permanece viva la Odisea? La respuesta es obvia: porque
sus personajes
están vivos, porque existe vida y porque existe el ser
humano.
F.- EL
HÉROE HOMÉRICO
Se han señalado
numerosas raíces
orientales en los poemas homéricos y en sus
héroes; sin embargo, aunque se
toman motivos, se eliminan crudezas y elementos fantásticos,
añadiendo el héroe
homérico una humanidad nueva. Algunos héroes son
creación de Homero, como es el
caso de Patroclo o Héctor: estas figuras personifican la
elevación espiritual,
la fidelidad, el amor al maestro, a la patria, al amigo. Esto es lo
nuevo de
Homero, entremezclado con escenas de crueldad primitiva procedentes del
ambiente de la épica tradicional con su elogio del valor y
de la astucia del
guerrero.
Los héroes
homéricos son excepcionales
hombres de antaño, pero seres humanos, provistos de defectos
y flaquezas,
aunque bien dotados de "areté, una
preeminencia que se basa en un conjunto de
cualidades: belleza física, virtud moral, virilidad,
elocuencia, fortaleza,
inteligencia, sentimiento del honor. De entre todas estas virtudes
algunas
adornan especialmente a determinado héroe: el coraje a
Aquiles, la
majestuosidad a Agamenón, la constancia a Ayax, la
reflexión a Odiseo.
El héroe homérico
se ve envuelto en una
intensidad y dramatismo que nos lleva a una tensión
creciente, un espíritu casi
trágico, en cuanto que el tema central de esta
poesía es el sufrimiento y el
destino del héroe.